Para solucionar el problemas de las fachadas comprometidas, se utilizaron quebravistas pintados con pintura de alta resistencia.

Se determinaron ángulos y posiciones de los paneles para lograr la mayor eficiencia de control solar, ya que en diferentes posiciones otorga diferentes posibilidades de protección solar.

En invierno, el quebravista resulta muy efectivo al regular la entrada del sol. En la foto siguiente se ve cuando el sol alcanza su elevación mínima de 33´. En verano, en cambio, se observa que debido a la separación entre los cristales y el quiebravista (a partir de los 56´aprox. de inclinación solar), estos son capaces de controlar efectivamente el ingreso del sol al interior del edificio.